Niños separados de sus padres y puestos en jaulas. Esta es la imagen que quedara de los Estados Unidos de Trump.
NIÑOS EN JAULAS

Niños separados de sus padres y puestos en jaulas. Esta es la imagen que quedara de los Estados Unidos de Trump.
Tres datos duros: 1) Sí, siguen perdidos 1,475 niños inmigrantes; el gobierno de Estados Unidos no sabe dónde están. 2) La administración de Donald Trump ha separado a cientos de niños de sus padres, luego de cruzar ilegalmente la frontera. 3) La culpa de todo esto es del presidente Trump. El podría parar esta cruel política de inmediato. Pero no quiere.
Fue la gran traición. El presidente Enrique Peña Nieto traicionó a millones de mexicanos cuando no le exigió a Donald Trump una disculpa por haber llamado criminales y violadores a los inmigrantes de México.
Los estadounidenses tienen que escoger qué tipo de país quieren ser: hostil a los extranjeros, cerrado al mundo y prejuiciado contra las minorías -como sugiere Donald Trump- o generoso, abierto e incluyente, como ha sido su tradición durante más de dos siglos. La decisión debería ser fácil. Pero no lo es.
Me preocupa que los cuatro candidatos mexicanos a la presidencia enfrenten a Donald Trump con demasiada ingenuidad.
El presidente Donald Trump tiene un muro en la cabeza. Por más que le digan que una muralla entre México y Estados Unidos no va a detener significativamente el paso de drogas y de indocumentados, él insiste en la absurda y anticuada idea.
El último comentario racista de Donald Trump no me sorprende. Pero lo que sí me sorprende es que tanta gente se haya tardado tanto tiempo en entender que el ocupante de la Casa Blanca tiene ideas racistas.
Si el 2017 fue el año imposible -el que nunca debió haber ocurrido- veo al 2018 como el año de la resistencia. Pero ¿resistencia a qué? Resistencia a las mentiras, ataques y ofensas del presidente Donald Trump.
Washington, D.C. Entiendo perfectamente por qué los periodistas no le caemos bien a muchos presidentes. Nuestro trabajo es descubrir y publicar lo que ellos quieren ocultar.
Donald Trump miente muchísimo. Pero casi seis décadas viviendo en México y cubriendo América Latina como periodista, me han preparado muy bien para dudar de casi todo lo que dice el presidente de Estados Unidos.