Mi hijo Nicolás va a cumplir 18 años en el verano y, por lo tanto, podrá votar en las elecciones presidenciales de noviembre en Estados Unidos. Quizás Nicolás no lo sabe todavía pero, en una elección muy cerrada, él y millones de jóvenes latinos decidirán quien será el próximo presidente (o presidenta) de Estados Unidos.
LA NUEVA CARA DE ESTADOS UNIDOS
